La natación fue su guía para un equilibrio físico, mental, espiritual y emocional. Se requiere control mental para nadar largas distancias, además, de la oportunidad de meditar y cuando lo haces, el espíritu sale a flote, te habla y tranquiliza. Por supuesto, la acción hace que el físico esté sano. Incursiona por primera vez en el deporte a los 28 años. Edna, considera que la natación salva su vida y le ayuda a enfocar su creatividad e hiperactividad para su bienestar.
“El apoyo de mi mamá fue la clave. Ella me introdujo al mundo de la natación, me compró todo el equipo adecuado y motivó para levantarme a las cinco de la mañana todos los días para entrenar”.
“El individualismo es una de las cosas que no entendía desde la infancia y sigo sin entender. El bienestar es parte de relacionarse con otras personas, lo veamos o no estamos conectados. Creo que cuando hacemos algo por una persona, se forma una cadena donde cada quien reacciona con una acción positiva. Si ligas tu corazón, mente y físico en una intención altruista logras el bienestar total”.
“Había logrado marcas y ganado medallas. Cuando empecé a nadar en beneficio de alguien, me despertó en otra realidad, en una causa que conecta mi espíritu con la actividad física. Así inició el proyecto “Por Ellas… Somos Uno” en el 2006”.
Esto demuestra que se puede alcanzar el bienestar espiritual y emocional a través del deporte. El reto deja de ser ganarle a otra persona, comienzas a competir contra ti mismo, buscas superar retos personales y los propios miedos.
“La armonía con uno mismo, con lo que nos rodea y la tolerancia son la clave para llevar una vida de bienestar.”
Edna decide usar la natación y experiencia personal para ayudar a más personas. “Por ellas…Brazadas en Pro de la prevención del Cáncer” tiene la misión de difundir la importancia para la prevención, detección y tratamiento oportuno del cáncer, así como promover una vida saludable a través del deporte.
“La edición Mar de Cortés ha tenido gran éxito y se realiza año tras año desde el 2008. La belleza de la naturaleza en La Paz te permite competir contra tus propios límites, contemplando delfines, mantarrayas y peces en el mar abierto. Además, participar en este evento conlleva un trabajo en equipo que enseña tolerancia y respeto hacia los demás demostrando que cuando los corazones se unen por una causa no hay imposibles”.