Una de las comunidades coralinas más saludables del planeta, se encuentra resguardada en el Parque Nacional Cabo Pulmo, Área Natural Protegida de México; el Parque Nacional está compuesto por 7,000 hectáreas de mar más la franja de la Zona Federal Marítimo Terrestre, que consiste en 20 metros de playa por encima de la marea más alta. Reconocido como Área Natural Protegida en 1995, este año celebra su XX aniversario.
Cabo Pulmo se considera una joya de la conservación marina a nivel internacional. Ha logrado un manejo participativo que incluye al Gobierno, Comunidad Local, Sociedad Civil, Instituciones Académicas y otros grupos que trabajan de manera colaborativa para cuidar y estudiar el arrecife. También promueven la importancia de su protección y conservación. Este parque es una zona de no pesca, y esta forma de uso ha reflejado un aumento de más del 400% de peces en los últimos 20 años.
Los arrecifes de coral son ecosistemas importantes y hogar del 20% de la vida marina que existe en el planeta. Son construidos por diminutos animales que viven en colonias y que se llaman pólipos, ellos no solo construyen la roca que conforma el arrecife, también son la base de una cadena alimenticia de muchos hermosos seres que dan color a la comunidad coralina. Los pólipos son tan frágiles, que al tocarlos pueden morir.
El arrecife asegura beneficios llamados servicios ambientales para las poblaciones aledañas y para todo el Golfo de California; entre éstos, ayudan a sostener el turismo de buceo y snorkel en la región. Cabo Pulmo es visitado por cientos de buzos.
Los corales capturan carbono atmosférico y limpian el aire contaminado. A través de un proceso bioquímico lento y complejo convierten el bióxido de carbono en una roca de carbonato de calcio. Los arrecifes son rompeolas naturales que protegen de tormentas y huracanes al disipar la fuerza del oleaje. Son además, zonas de reproducción, refugio de especies marinas y laboratorios vivos para investigadores y estudiantes.
Durante la visita a los arrecifes de coral, debemos ser cuidadosos debido a la gran fragilidad de estos ecosistemas. Por eso, la implementación de un código y/o reglamento de buenas prácticas de turismo y respetarlas es vital para la conservación de sitios como Cabo Pulmo.
Las buenas prácticas que se sugieren para los guías y visitantes:
- Evitar tocar y manipular con las manos animales marinos.
- Evitar colectar animales o cualquier otro elemento del ecosistema.
- Controlar la flotabilidad.
- Controlar el aleteo.
- Evitar el uso de bloqueadores solares y fomentar el uso de lycras o camisetas para protegerse del sol o bien bloqueadores biodegradables.
- Pagar la cuota de entrada a las áreas naturales protegidas.
Las buenas prácticas que se sugieren para los operadores de turismo acuático:
- Usar limpiadores biodegradables para el equipo y /o lancha.
- Respetar el número de lanchas y buzos permitidos en los sitios de buceo.
- Evitar verter aguas negras en el mar.
- Dar mantenimiento a los motores de las lanchas.
- Pagar la cuota de entrada a las áreas naturales protegidas.