La característica principal de la gastronomía sudcaliforniana es la frescura de sus productos. Y cómo no, si “El Acuario del Mundo” provee los más ricos pescados y mariscos. En La Paz se come tan fresco que las almejas son guardadas en el mismo mar y puedes ver como el mesero va por ellas cuando termina de tomar tu orden.
La opción de excelentes marisquerías a lo largo del malecón es variada, todas ofrecen sus platillos estrella como ensaladita de sierra, ceviche de cochito, almejas chocolatas o agua chile de camarón. Y desde hace más de 40 años, el restaurante Bismark-cito se erige frente a la playa del malecón ofreciendo ostiones frescos y sus famosísimos tacos de pescado y mariscos.
Además de los frutos del mar, los productos orgánicos, sobre todo del Pueblo Mágico de Todos Santos, son esenciales para la gastronomía paceña en donde los menús son planeados de acuerdo a la cosecha de cada temporada. Lechugas frescas y verduras coloridas adornan los platos de los reconocidos chefs que han hecho de La Paz su hogar.
Parte de la tradición de la ciudad son los famosos carritos de “hates”, los paceños han hecho del hot dog todo un arte, servido con salsa, verduras, crema y pan especial hecho en La Paz; algunos hateros incluyen carne adobada, queso, frijoles, elotes como “toppings” para los hot dogs.
Los restaurantes imperdibles en La Paz son:
- Bismark-cito, el lugar de tradición.
- Azul Marino y Nim de la chef Cristina Kiewek.
- Sorstis, comida mediterránea del chef Alessandro Mancuso.
- Las Tres Vírgenes con las creaciones del chef Jesús Chávez.
- Nómada, restaurante y tienda de productos orgánicos.
- Dulce Romero, panadería y restaurante de la chef Dulce Romero.