En los ayeres, por el camino real, muchos aventureros transitaron. Descubrieron, se deleitaron e inclusive se quedaron a vivir en esta tierra perfumada. Vinieron en busca de acontecimientos que tal vez solo existían en su imaginación.
Encontraron ranchos esparcidos por las montañas, se cautivaron por la forma de vida y la devoción por naturaleza. Tuvieron la oportunidad de conocer las obras arquitectónicas dejadas en un pasado reciente por los misioneros jesuitas y descubrir espacios donde los antiguos pobladores plasmaron a través del arte rupestre su huella por la península.
Por tierra, mar o aire esta Baja California Sur nos invita a la aventura y genera una especial emoción donde el tiempo no tiene límites.
Hoy continúan esos aventureros recorriendo las veredas, que se convirtieron en brechas y más tarde en caminos. Así como Harry Crosby, Arthur North, Abelardo Rodríguez, y muchos más. El equipo de Tendencia recorre esas rutas en un viaje a la región central de la California del Sur, con el propósito de ser un puente entre el patrimonio natural y cultural, para motivar al viajero a recorrer este paraíso del reino de los guaycuras.
La Sierra de la Giganta y el Golfo de California son testigos de esta singular región. Loreto, reino de los guaycuras fue capital de las Californias de 1697 a 1777.
La aventura puede iniciar en la misión de Loreto, lugar que representa un ícono histórico y turístico, donde su gente conserva con respeto y admiración su edificación de aproximadamente 325 años. El corazón de este pintoresco poblado alberga al museo de las misiones jesuitas. En él se resguardan y exhiben alrededor de 300 piezas, entre vestigios arqueológicos, pinturas y esculturas sacras de los siglos XVII y XVIII, campanas, incensarios y documentos antiguos, Destaca una campana que cayó al mar en 1875, después de que quisieron llevársela de la región, 100 años después (1975) unos pescadores la sacaron al atraparla en sus redes.
Estos lugares en apariencia inhóspita son como lo confirman los diversos aventureros: el paraíso de perlas, el acuario del mundo, el otro México, tierra del canto del desierto, un paraíso imaginario, el lugar de los majestuosos arreboles, tierra encantada, en si la tierra perfumada.
California del sur… Joyel de los colores vespertinos, predilecta del sol, signo gramatical de los destinos, novia de las espumas…cenicienta bellísima del golfo…une las voces de tus caracoles… y asómate a mirar los arreboles…carreteras que conduzcan a…sedientos de paisaje y de aventuras… (Jesús López Gastelum)