La Paz, es un destino que destaca por cautivar a los visitantes con la calidez de sus playas, lo cristalino del mar, y la tranquilidad del oleaje. Existe un impresionante ecosistema desértico, llamado “El Mogote”: cuenta un poco más de 600 hectáreas y sirve como una barra arenosa natural para proteger a las especies marinas de las tormentas, huracanes, oleajes y corrientes submarinas, además de ser un imperdible por las bellas imágenes.
Por sus características dunas, se ha convertido en un referente para el viajero que busca enriquecer su visita a La Paz, a través de actividades que saquen su lado más aventurero como lo es el sandboarding: una experiencia que desafía las leyes de la física y acelera las emociones para surcar sobre una tabla los montículos de arena a toda velocidad, ya sea de pie, sentado o acostado; y lo mejor es que es una actividad muy segura que puede practicar cualquier persona.
Al caer la tarde y tras varios descensos, se recomienda subir a la duna más alta para disfrutar de las mejores postales en la zona árida del Mar de Cortés con la presencia de los tonos rojizos que cubren el horizonte, embellecido por el mar y las montañas que lo resguardan. Es toda una oportunidad para crear una sesión fotográfica desde el celular o con cámara profesional y enmarcar la sensación de libertad única.
La experiencia te inspirará a compartir con los viajeros la diversidad de escenarios y actividades que integran la oferta en los micro destinos que conforman La Paz, como el Mogote.
Los invitamos a descubrir las maravillas del Puerto de Ilusión e incentivar que sus itinerarios de viaje sean enriquecidos con exclusivas experiencias donde la naturaleza sea el protagonista.