Teniendo como sede a “La Casa de Piedra”, abrió sus puertas para recibir a las autoridades de los tres niveles de gobierno, Cuerpo de Síndico, regidores que integran el Honorable Décimo Ayuntamiento de Loreto y público en general, para conmemorar el día de la firma de la Acta de Adhesión de las Californias a la establecida República Mexicana en 1824.
Loreto es cuna y madre de la Alta y Baja California; origen de ciudades, pueblos y ranchos. Guarda una maravillosa historia y escenario de grandes eventos que han marcado el devenir; anhelo de muchos y logro de pocos, tierra de esperanza y de sueños, hogar de familias por más de 3 siglos y punto de partida del camino real misional.
“Por milenios habitado por los pueblos ancestrales guaycura y cochimí, mismos que del mar pescaron sus especies y de la tierra sus frutos y animales para hacer de ellos el sustento; indómitos pueblos que no se doblegaron ante la espada, pero que si recibieron pacíficos al Padre Eusebio Francisco Kino y posterior a Juan María de Salvatierra, que sin más armas que la cruz y su inquebrantable fe y vocación, dieron inicio al proceso histórico de esta bella región de las californias, el 25 de octubre de 1697, hecho de enorme trascendencia que dio origen a nuestro pueblo: ¡el pueblo sudcaliforniano!”, expresó la presidenta de Loreto Paola Cota Davis.
La firma del Acta de Adhesión de las Californias en 1824, a la recién instituida República Mexicana, fue un proceso doloroso para toda la “Nueva España”, y que derivó en el movimiento con el cual germinó nuestro país, enalteciendo este singular acto cuando, hace 199 años – un 16 de agosto de 1824–, valerosos ciudadanos con el temple que las condiciones y circunstancias exigían ante la firme amenaza de invasión y posesión por fuerzas extranjeras, definieron que Loreto y las Californias, Alta y Baja eran parte de la República Mexicana.